Miguel Mihura

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ANALICEMOS TRES SOMBREROS DE COPA

Texto a analizar.

(EL ANÁLISIS DEL TEXTO ESTÁ AL FINAL).

DIONISIO.- A mí no me gustan los huevos fritos…

DON SACRAMENTO.- ¡A las personas honorables les tienen que gustar los huevos

fritos, señor mío! Toda mi familia ha tomado siempre huevos fritos para

desayunar… Solo los bohemios toman café con lecha y pan con manteca.

DIONISIO.- Pero es que a mí me gustan más pasados por agua… ¿No me los podían

ustedes hacer a mí pasados por agua…?

DON SACRAMENTO.- No sé. No sé. Eso lo tendremos que consultar con mi señora.

Si ella lo permite, yo no pondré inconveniente alguno. ¡Pero le advierto a usted

que mi señora no tolera caprichos con la comida!…

DIONISIO.- (Ya casi llorando.) ¡Pero yo qué le voy a hacer si me gustan más pasarlos

por agua, hombre!

DON SACRAMENTO.- Nada de cines, ¿eh?… Nada de teatros. Nada de bohemia… A

las siete, la cena… Y después de la cena, los jueves y los domingos, haremos una

pequeña juerga. (Picaresco.) Porque también el espíritu necesita expansiones, ¡qué

diablo¡ (En este momento se le descompone la carra que estaba tocando y se

queda muy preocupado.) ¡Se ha descompuesto!

DIONISIO.- (Como en el acto anterior PAULA, él la coge y se la arregla.) Es así. (Y se

la vuelve a dar a DON SACRAMENTO, que, muy contento, la toca de cuando en

cuando.)

DON SACRAMENTO.- La niña, los domingos, tocará el piano, Dionisio… Tocará el

piano, y quizá, quizá, si estamos en vena, quizá recibamos alguna visita…

Personas honradas, desde luego… Por ejemplo, haré que vaya el señor Smith…

Usted se hará en seguida amigo suyo y pasará charlando con él muy buenos

ratos… El señor Smith es una persona muy conocida… Su retrato ha aparecido en

todos los periódicos del mundo… ¡Es el centenario más famoso de la población!

Acaba de cumplir ciento veinte años y aún conserva cinco dientes… ¡Usted se

pasará charlando con él toda la noche!… Y también irá su señora.

DIONISIO.- ¿Y cuantos dientes tiene su señora?

DON SACRAMENTO.- ¡Oh, ella no tiene ninguno! Los perdió todos cuando se cayó

por aquella escalera y quedó paralítica para toda su vida, sin poderse levantar de

su sillón de ruedas… ¡Usted pasará grandes ratos charlando con este matrimonio

encantador!

DIONISIO.- Pero ¿y si se me mueren cuando estoy hablando con ellos? ¿Qué hago yo,

Dios mío?

DON SACRAMENTO.- ¡Los centenarios no se mueren nunca! ¡Entonces no tendrían

ningún mérito, caballero!…

ANÁLISIS DEL TEXTO. COMENTARIO DE TEXTO

 

Localización.

El texto que vamos a comentar corresponde a la obra teatral Tres sombreros de copa, cuyo autor Miguel Mihura la escribió en 1932 durante la II República, sin embargo, no fue estrenada hasta 1952. Entre estas dos fechas tenemos la brecha fatídica de la Guerra Civil marcando una ruptura socio-política y literaria de la España de 1931 terminando con la férrea dictadura del franquismo, y muy en partcular hasta los finales de la década de los sesenta. Nos situamos pues en una época en donde el teatro, considerado como un arte en donde la vida misma es mostrada con toda claridad, la censura de la época no permitía otra obra que fuera en contraposición de los intereses del régimen impuesto.

Seguidamente  vamos a analizar una obra llena de humor, grotesca, de tono ridículo, al estilo del gran maestro Valle-Inclán con su esperpentismo, y que bajo este abanico Mihura pone en solfa los postulados de una España inmovil, arcaica y sin visos de prosperar.

Análisis del contenido.

El tema lo definimos como  la opresión de las costumbres de la sociedad burguesa que ahogan a las  más humildes

Como decíamos anteriormente, en España y en la década de los 50, la falta de libertad era palpable. En el texto seleccionado, así como en el resto expuesto, el tono que predomina es el imperativo, ejemplo: ”pero le advierto a usted que mi señora no tolera caprichos con la comida”. Mihura utiliza el humor para salvarse de la censura y hace reír al respetable público. Este hecho supuso que el autor no fuera catalogado como autor desarraigado(fuera del contesto político dominante).  Fue el único aceptado en tanto que humorista en los teatros convencionales y comerciales de la época.

De la actitud y el tono vamos a decir que es una crítica, como lo indicamos más arriba, con un tono exageradamente humorístico y ridículo. En  Don Sacramento, observamos el Don para indicar la posición social, el nombre Sacramento ya dice algo de conservador, y la escena del juego con la carraca de dicho personaje lo dice todo, por ejemplo.

De la estructura externa e interna vamos a referirnos como procede.:tres partes se aprecian claramente . En la primera los postulados conservadores son evocados. La tristeza de la niña por el comportamiento «inusual» de un hombre que se tiene con casar la hija de Don Sacramento. Dionisio, el pretendiente, representa a la clase humilde,  y  como observamos, se aloja en un hotel insalubre donde hay ratas en la habitación de Dionisio (son conejos, cazados-comprados por un cazador que compareció en una escena anterior, junto con otros personajes estrafalarios o fuera de lugar).  El desorden en que ha quedado es el resultado de esa intrusión propio de las clases más pobres. La primera y segunda parte están relacionadas con los imperativos en todas las escenas, así como la degradación de la clase humilde «los bohemios».  Hay que seguir unas normas de conducta, no pasearse bajo la lluvia(ridiculez), sumisión y humillación(y casi llorando). La tercera parte sería la falta de salubridad ya indicada para tocar con el esperpento y la imagen rotesca de las ratas, o de la falta de dientes de la señora anciana. Nos recuerda a las imágenes de los espejos de Luces de Bohemia de Valle-Inclán.

Como tema secundario comentaríamos que se trata de una crítica contra las apariencias, el alardear que la clase burguesa tenía por costumbre adoptar, ejemplo, hablando de Napoleón  es importante lo que aportó su filosofía, organización jurídica, por ejemplo, sino que aquí tiene más importancia   la parte gestual . También la hipocresía de la alta sociedad(haremos una pequeña juerga)

Estructura de la forma.

Nos encontramos con una obra teatral con sus diálogos propio de género. La primera se apoya en los hechos de los personajes, y la segunda en la crítica irónica que Mihura quiere hacernos ver, y no lo hace cláramente, no podía, sino con la sutileza haciendo representar unas acciones cómicas «, en todas las casas hay cromos». La diferencia de clases Mihura quiere destacarlas,  y la que manda es la alta burguesía, que en este caso lo expone permitiéndose  irse de juerga, pero es ella la que dicta cuando se debe uno divertir.

Los personajes principales son masculinos, el personaje femenino aparece someramente. Dionisio tiene que estar supeditado a lo que manda, ordena don Sacramento, pero la que manda en casa es su mujer, como la cita ya indicada. Los personajes son utilizados hábilmente por Mihura para ridiculizar una época que nos quiere hacer ver con el mobiliario » el gabinete azul es donde hay muebles dorados», supustamente estamos en la segunda parte del XIX, ya que también habla de Napoleón I, y en Francia reinaba el Segundo Imperio.

 Las acotaciones teatrales son múltiples para querer dar a entender al público el momento escénico . Es un continuo diálogo utilizado intencionadamente por el escritor para desvelar todos los propósitos ya citados. Su discurso carece de toda lógica, no es coherente, no hay temporalidad, ni cronología, todo es un desorden, que es lo que justamente Mihura quiere hacer ver para resaltar el carácter humorístico y que el respetable suerte unas carcajadas.

Si tenemos que hablar de un Yo literario, este sería un NOSOTROS, el conjunto de la sociedad lo que representa Dionisio, Don Sacramento y Paula. Tres posiciones bien distintas, el oprimido, el opresor, y la anulación total de la mujer no es este el papel que representa Paula. Todo ya citado anteriormente.

Mihura,  lo que quiere aportar al teatro es una continuación de lo interrumpido por la Guerra Civil. Valle-Inclán que era una persona muy crítica con el poder, ya no se representaba en los teatros comerciales, Mihura se adelantó a escribir en un momento de libertad, pero no sabemos por qué circunstancias durante la II República no se pudo representar, quizás por falta de medios.

Si tenemos que hablar de apóstrofes, estas dan vida y tono al diálogo, están en todas partes. ¡Dionisio ! ¡ Dionisio!. Las frases de Don Sacramento son más extensas que las de Dionisio, evidente, Don Sacramento impone sus reglas. Los puntos suspensivos son utilizados tanto por Don Sacramento como por Dionisio, para dar continuidad a los propósitos más de Don Sacramento que de Dionisio (que no lleva Don). Existe algún vocabulario como, tafetán, gabinete azul, para indicar más o menos la época en que se desarrola la acción lo que pretende el autor es crear, con diversos procedimientos, una sensación de anacronismo generalizado: don Sacramento es la encarnación de una sociedad aburguesada caduca, fuera de la realidad social más viva y dinámica. Otro ejemplo, solo los asesinos o los moderados monederos falsos (esta expresión denota claramente el éxito alcanzado por una obra de este título, Los monederos falsos, publicada en 1925 por André Gide) “La princesa está triste, qué tendrá la princesa” , indican una manera de comportarse y costumbres, por ejemplo vemos que el diálogo es fluido y las interrogaciones son un ejemplo (¿verdad?). Tanto la alusión anterior a una obra literaria como al principio de la escena las referencias a la famosa “Sonatina” de Rubén Darío, La princesa está triste… ¿Qué tendrá la princesa?, se emplean con la misma intención burlesca y paródica que caracteriza toda la obra. La niña toca el piano, muy elocuente, ya que el piano lo tocaban las niñas de la alta sociedad en la época. Mihura hace una clara distinción de lo que es la alta burguesía. Los conectores discursivos están remplazados por las acotaciones,  y los verbos son de acción y de estado.

Conclusión.

De Miguel Mihura sabemos que fue un escritor que se situó en el lado de los ganadores, no postuló por la II República. . Fue creador de la revista humorística «La Codorniz». Su teatro entró dentro de lo comercial, había por lo tanto, que llenar los teatros, había que divertir al público y de esta manera la atención no estaba centrada en las penurias socio-políticas del momento. Posteriormente y de cercanos en su tiempo, tanto Camus como Sartre,se acogieron a las intenciones existencialistas, la defensa de la libertad y responsasabilidad de la sociedad, que en este caso Mihura quiere dar a entender para que se reflexione. Por otra parte, anotemos que cuando se estrenó la obra, España no estaba reconocida internacionalmente, y no fue hasta 1955 en que los EEUU reconocen al régimen de Franco y se entra en la ONU. Por último, A mi modo personal de ver, Mihura quiere hacer un reconocimiento a Valle-Inclán utilizando su estilo literario, ya que este fue uno de los grandes del teatro del primer tercio de siglo.